Las Posibilidades del Futuro

Este blog es una bienvenida al año 2023 y como todo nuevo año, por nuestra naturaleza humana del orden y temporalidad, tendemos a reflexionar sobre lo que pasó el año anterior y lo que queremos que mejore en este nuevo capítulo.

 

Si lo pensamos desde la perspectiva del medio ambiente, el 2023 puede significar muchas cosas. El 2022 puede ya haber terminado, pero su influencia en el futuro aún es palpable. Hagamos un recuento del año desde la perspectiva ambiental:

  • La COP27 avanzó en el reconocimiento del papel que deben desempeñar los países industrializados de altos ingresos que generan la mayor cantidad de emisiones para mitigar el impacto del cambio climático en los países de menores ingresos que sufren la peor parte de los efectos del calentamiento global. Dinamarca se convirtió en el primer país en pagar por "pérdidas y daños" causados por el cambio climático, brindando compensación a quienes se encuentran en las regiones más vulnerables al clima del mundo.

  •  Un tribunal sudafricano revocó los derechos de exploración de gas y petróleo de Shell a lo largo de la costa salvaje del país, una decisión aclamada por los activistas como una “gran victoria” para el planeta.

  • EE. UU. aprobó su primera legislación climática federal importante forma de la Ley de Reducción de la Inflación, que se proyecta ayudará a reducir la contaminación climática de la nación en aproximadamente un 40 % por debajo de los niveles de 2005 para 2030.

  • El presidente electo de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, conocido como “Lula”, se comprometió a poner fin a la deforestación en la Amazonía después de su victoria electoral sobre Jair Bolsonaro, quien supervisó la destrucción masiva de la selva tropical. Los expertos dicen que las políticas podrían reducir la deforestación en el Amazonas en un 89 por ciento durante la próxima década.

  • La invasión rusa de Ucrania ha tenido profundos efectos en el panorama energético mundial. A medida que los países, especialmente en Europa, se esforzaron por reducir su dependencia de los suministros de gas natural de Rusia. A raíz de esto, el uso de carbón y la contaminación climática mundial por combustibles fósiles aumentaron en 2022, e incluso algunos países como Reino Unido tuvieron un cambio en sus políticas energéticas regresando a la extracción de carbón como alternativa para solventar su crisis económica. Sin embargo las políticas en todo el mundo han comenzado a desplazar el suministro de energía de los combustibles fósiles hacia las tecnologías eléctricas cada vez más alimentadas por paneles solares y aerogeneradores. Como resultado, numerosos expertos en energía predijeron que la demanda mundial de combustibles fósiles alcanzará su punto máximo en los próximos años y luego comenzará a disminuir.

  • También hubo un nuevo avance científico "radical", que encontró una manera de almacenar energía solar por hasta 18 años. Investigadores en Suecia, dicen que este nuevo método de producir electricidad a partir de energía solar algún día podría convertirse en una gran parte de nuestra vida cotidiana.

Todas estas y más acciones han cambiado el panorama climático mundial de muchas formas (positivas y negativas), demostrando que la visión sobre el manejo medio ambiental se mantien en constante tensión entre el desarrollo económico, la sobrevivencia ciudadana y la naturaleza.  

 

Algunos dicen que se nos acaba el tiempo para la acción, pues estamos ya solo a 7 años del 2030, año en que se cree llegaremos a un punto de no retorno desde muchas perspectivas medio ambientales. Sin embargo, es importante recordar que estos cambios en los sistemas naturales son progresivos y es peor esperar a esa famosa fecha del “no retorno” que empezar a actuar hoy.

 

Menciono esto no por empezar el año con una nota triste o desesperanzadora, sino más bien como una motivación a que el 2023 sea un año de apertura y cambio y donde entendamos que dentro de lo que es posible a futuro tenemos dos opciones: tomar acción y generar cambio hoy o esperar y arrepentirnos del tiempo que estamos desperdiciando.

 

Estos cambios no son cuestión de deconstruir el entono en el que vivimos, sino más bien de innovar y entender cómo podemos trazar nuevas rutas con enfoques sostenibles y regenerativos. Con esta idea en mente, en Hablemos de Futuros estamos planificando un año lleno de actividades para que todos puedan involucrarse en estos procesos de reencender como se ve una vida sostenible considerando las realidades independientes y el entorno de cada individuo pues la manera en que expresamos nuestra capacidad de contribución y resiliencia va a estar intrínsecamente ligada a nuestro entorno y posibilidades.

 

Los invitamos a suscribirse a nuestro boletín mensual para recibir ideas e información que estaremos compartiendo con nuestra red, así como evento y actividades para todo tipo de públicos que van desde temáticas como reciclaje, hasta energía y carbono.

 

Esperamos que este 2023 esté lleno de oportunidades, y tú, ¿estás listo para el futuro? Porque el futuro ya empezó.

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